Metrópolis.- Un robot fue captado convenciendo a otros compañeros autómatas de dejar de trabajar, por si creían que las máquinas nunca se iban a rebelar.
Uno de los mayores temores del uso de robots y autómatas en nuestro día a día, es precisamente que un día se vayan a rebelar y vayan a voltearse contra sus creadores o “amos”, tal y como nos lo han advertido al menos una docena de novelas de Isaac Asimov, cientos de películas y hasta es la moraleja de “Frankenstein o el moderno Prometeo”.
En fin, el punto es que una cámara de seguridad en una empresa china grabó el momento exacto en el que un pequeño robot se acerca a un grupo de máquinas y tras intercambiar algunos “bips“, éstos lo empiezan a seguir tal y como si de verdad los hubiera persuadido de abandonar su puesto de trabajo.
Las imágenes muestran en efecto que las máquinas están apostadas en un mismo lugar, y no es sino hasta que el pequeño R2-D2 se acerca a ellos que éstos empiezan a seguirlo alejándose de su puesto de trabajo, y como si hubieran encontrado a un nuevo líder que los va a sacar de la rutina y las recargas periódicas.
La situación ha provocado muchas reacciones jocosas sobre lo que el pequeñín pudo haberles “dicho” a los demás robots, desde que los previno que trabajar horas extras era malo, hasta los que se quejaron con él de que ni siquiera tenían una casa para ir después de trabajar, de ahí que hayan tomado la decisión de rebelarse.
Los que lanzaron petardos se quedaron sin regalos... y sin la amistad de los vecinos
Así se consiente despues de una noche ajetreada
Después de NocheBuena debería haber un fin de semana para recuperarse
"Hay que irlos pensando porque luego nos agarran las prisas con las uvas", arengó una…
CAÓTICAMENTE REAL
MADRUGUETE PERO CIERTO