Teherán del Medievo.- Un luchador de Irán pateó a una edecán que porque no le gustó la ropa que traía puesta, y el público le puso una verdadera tunda.
La grotescona escena tuvo lugar en Moscú en la liga rusa de Artes Marciales Mixta, cuando el luchador Ali Heibati estaba en el ring para comenzar el combate contra su oponente, y fue ahí cuando una ring girl (las edecanes que sostienen el número de round) caminó delante de él provocando la molestia del sujeto quien le dio un puntapié, ante la sorpresa de ella, del referee, del público y de Dios mismo.
Al percatarse de lo que había sucedido, el referee suspendió el combate, descalificando de inmediato al individuo venido del desierto, y justo cuando se disponía a retirarse, muchas personas que estaban en el público se le dejaron venir como para calar sus habilidades de lucha.
En los videos que ya están circulando se observa justamente la tremenda golpiza que se lleva Heibati (a propósito no le vamos a decir “Alí” para que cale), y que por más que intenta huir del escenario, recibe un torrente de golpes que lo harán meditar sobre el concepto que tiene de las mujeres.
Cuidado, imágenes fuertes, se recomienda discreción:
“Quiero disculparme públicamente con ella. Soy un hombre casado, así que respeto el género femenino. Ella estaba haciendo su trabajo y yo, después de la pelea, tampoco admití mi culpa, porque también me golpearon en la cabeza”, aseguró después el sujeto, pero como que no le creemos por aquello de su fe ciega en las Suras.
Cabe mencionar que el organismo ya lo suspendió de por vida, debido a que esta escenita no es la primera que hace, y pues ojalá ahora se dedique a sembrar dátiles, o algo alejado de las mujeres.
Aquí otra toma de la preciosa secuencia que llegará hasta Teherán como tutorial sobre cómo comportarse al estar en un país de Occidente.
Este video además de darnos color sobre muchas cosas de las costumbres del desierto, también nos hace dudar de que en caso de un conflicto en esa región del mundo, dudamos que Rusia vaya a tomar bando con Irán, pero bueno, no es el lugar para hablar de geopolítica.
DESESPERADAMENTE REAL
COLONIZADORAMENTE CIERTO
Además de cena en casa ajena, conocerán a las sobrinas del patrón
Lo usaron de medio de transporte hasta el valle que la nieve cubrió
"¿Cómo vas, ma'? ¿Ya hay buñuelos?", preguntó un chavo todavía en pijama
ESPLÉNDIDAMENTE REAL