Colonia Trepidante.- Los vecinos de unas colonia pensaban que estaba habiendo sismos constantemente pero resultó que eran vibraciones que venían de una fábrica de las cercanías.
Esto fue lo que vivieron los lugareños que habitan en la colonia Anáhuac en la Ciudad de México quienes juraban que las vibraciones que sentían eran de temblores constantes, sin sospechar que provenían de una empresa que manufacturaba tableros eléctricos y provocaba las vibraciones como si fueran sismos.
Y fue hasta que la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial intervino y suspendió las actividades de la compañía que generaba las oscilaciones y que tenían a los vecinos resignados a vivir en la Pangea.
“Hicimos la medición, constatamos que está rebasando la norma, se le exhortó a la empresa que hiciera un cumplimiento voluntario, es como el primer paso que nosotros hacemos como Procuraduría Ambiental, lo que estamos haciendo es aplicar una medida precautoria porque estamos constatando que hay una violación a la normatividad”, aseguró Mariana Boy, titular de la dependencia luego de constatar lo que decían los vecinos de la sensación de estar atrapados en un dildo gigante.
El hecho de que en los últimas semanas se hubieran registrado muchos micro sismos en el Valle de México no había ayudado en nada en distinguir las oscilaciones que provenían de la Tierra a aquellos que venían de las máquina de la escandalosa empresa.
De igual forma, Boy explicó que este tipo de vibraciones generan grietas, vidrios rotos y pérdida de tranquilidad, de ahí que haya procedido la clausura hasta que aprendan a trabajar en silencio.
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