Increíble pero cierto

Este genio pudo ser el Bill Gates mexicano pero el destino se la jugó feo

Tal vez llegó Bill Gates a “comprar” a la empresa

Muro de los lamentos.- Esta es la historia de que nadie sabe y nadie supo, de cuando existió una computadora 100% mexicana que pudo haber competido (y vencido) a gigantes de la industria como IBM o Mac.

Todo empezó en 1980, cuando los gringos boicoteaban los Juegos Olímpicos de Moscú, los Bee Gees cambiaban su música de rock a pop, y se daba el boom de las computadoras en todo el mundo. En ese entonces, apenas si se vislumbraba la posibilidad de tener una computadora en casa o en la oficina, precisamente por el alto costo de las mismas.

Fue así como la empresa mexicana Printaform lanzó su máquina Printaform Cado Systems que competía al “tú por tú” con los modelos PC 5150 y 128 K de IBM y Macintosh, respectivamente, pues el modelo mexicano no solo era más económica que su competencia sino que además se podía “transportar” ya que se podía meter en una maleta y arrastrar con su monitor de 12 ”, en lo que podemos aseverar que fue la primera compu portátil de la historia.

Printaform cuyo dueño era el empresario Jorge Espinosa Mireles, ya tenía experiencia en la fabricación de calculadoras, cajas registradoras y máquinas de escribir eléctricas, así que el “brinco” hacia los sistemas de cómputo se dio de manera natural.

¿Y qué fue lo que paso? Qué llegó Bill Gates a “comprar” la empresa del mexicano pero sin firmar cheques, nah, no es cierto, ¡nooooo! sí es cierto. Eso fue justamente lo que sucedió. Ambos empresarios se reunieron para firmar un convenio de colaboración (alianza) para que las Printaform incluyeran Windows.

Hasta ahí todo iba bien todavía, pero Espinoza Mireles también llamado “El Quijote de la comunicación”, fue secuestrado por integrantes del Partido Revolucionario Obrero Clandestino Unión del Pueblo (PROCUP), quienes dejaron en la bancarrota a él y a su familia tras el pago de su rescate. Y de ahí, todo se vino abajo.

Printaform fabricaba computadoras en Hermosillo, Sonora, y pudo haber sido un gigante mundial de las computadores, pero el destino se interpuso.

Y por si no la viste: Una conductora de Televisa quiso entrarle al reto de “las cajas de leche” y se partió la mother en pleno programa en vivo.

Adolfo Santino