Clásico que salías porque tu “chamba” es ser influencer y terminas con Covid_19

Ir a la playa es parte del trabajo, dicen

México.- ¿Cuántos días llevamos sin que un influencer o youtuber la cague? Cero, amigos, el día de hoy vamos en ceros pues le tenemos otra de una influencer que simplemente se le chispoteó, pero gacho porque esto no es otro giveaway, sino su propia salud.

Su nombre es Tania Rendón, y por lo que vemos en internet es conductora, pero principalmente influencer de Monterrey, porque sí, tenía que ser de Regiositlán.

Ahora, en la foto de aquí arriba la vemos muy feliz y contenta, pero esta influencer se expondría a demasiada felicidad que finalmente “la alcanzó” el Covid_19, porque ya saben que solo es cuestión de tiempo para que el coronavirus toque a tu puerta y CHAM, PUM, PAZ.

En una declaración a sus fans, la influencer Tania Rendón confesó dar positivo en Covid y presentar síntomas leves, como dolor de cabeza, dolor de cuerpo y tos, misma que mientras platicaba dejaba salir sin ningún cuidado.

No sé ustedes pero al ver esto pensaba: ¡aaaahhhh tápate cuando tosas! Rendón afirma que se encuentra en cuarentena solitaria pero igual, ¡aaaahhh!

La influencer de belleza (o eso suponemos) afirma que los síntomas de Covid han sido leves, pero lo que realmente ha lastimado su espíritu es la malicia y la falta de empatía en la gente que la ha atacado por decirle que se ha paseado por la playa. ¡Pues sí pero fue por chamba, ustedes no entienden!

Contó la historia de una chava que la atendió en una clínica

donde se hizo la prueba. Sin su consentimiento, esta “chica de la fila” le tomó una foto y la subió a páginas de chismes, cosa que lastimó realmente su fe en la humanidad.

Por ello, Tania decidió confesarse ante sus seguidores, a pesar de los consejos de no hacerlo.

Amiga influencer, ¿dónde te tocó el Covid_19?

Tania menciona a otra compañera y socia influencer que se encontraba con ella en importantísimas juntas de trabajo y que también salió positiva. Su nombre es Flor Véliz y como pueden observar en la portada de su confesión, el Covid es algo feo pero más feo es no sonreír.

Así el acontecer de estas dos muchachas, que hasta su Covid tiene privilegios porque les tocó leve.

Ni hablar.

Seguiremos informando