México.- Hace algunos ayeres, los recién casados Hailey y Justin Bieber se mudaron a su mansión en algún lugar lujoso de Estados Unidos. En ese lugar construyeron su nidito de amor, ahora refugio de cuarentena que alberga a los dos tórtolitos, un perro y probablemente un grupo abundante de empleados domésticos.
Con el confinamiento, los Bieber, adorables cristianos, empezaron a transmitir momentos de su vida diaria para el entretenimiento de las fans de Justin, porque dudo que alguien más vea esto… bueno, yo lo hice pero en nombre del periodismo.
Cuál sería mi sorpresa al entrar en el video donde supuestamente harían galletas, pero terminaron haciendo bebés.
Hailey Bieber decidió compartir una receta para hacer galletas libres de gluten con chispas de chocolate. Y como Justin nada más anda viendo qué pica, se le unió interrumpiendo a su mujer en incontables ocasiones. Ay las veces que le grité a la pantalla DEJA QUE HAGA LAS MALDITAS GALLETAS EN PAZ.
De hecho, las interrupciones de Justin Bieber fueron tantas y tan intensas que todo terminó en un delirrico, obviamente bien editado por las personas que editan sus cosas, pero que le da un cortón a la narrativa justo en el momento en que comienzan la suave caricia.
Les dejamos 8 minutos peor invertidos de la historia, pero pues igual dense a partir del minuto 6, donde comienza que el ji ji ji y el ja ja ja y terminan cortando el video.
PRESUMIDAMENTE REAL
AÑORADAMENTE REAL
"¿Todavía no pasa Año Nuevo?", preguntó desorientado un sujeto que creía que estábamos en martes
Un duro golpe a los boomers que van nomás a pasearse
"¿Cómo es posible que la gente esté dispuesta a hacer lo que sea por dinero?",…
Los que lanzaron petardos se quedaron sin regalos... y sin la amistad de los vecinos