Hollyweed.- Lo último que supimos del alguna vez sex symbol y super estrella, Johnny Depp, es que estaba hundido en el alcohol, la depresión y el descrédito. Todo el teatrito de su divorcio con la actriz Amber Heard le costó que lo despidieran de la saga Piratas del Caribe y que todos lo tacharon de violento. Pero ahora las cosas han cambiado.
Las grabaciones de sus terapias de pareja han dado la vuelta al mundo y se acompañaron de fotografías en las que se ve el dedo de Depp prácticamente rebanado cual salchicha gracias a un botellazo de Amber. Así es, le rebanó los dedos al mismísimo Manos de Tijera esta chava.
Además, el contenido de los audios han dejando muy ardidos a los fans del actor, quienes reclaman que Johnny Depp sea reivindicado como Dios del mundo mientras que Heard quede cancelada inmediatamente.
Esta historia de millonarios, cocaína, alcohol, caca y celos comenzó en 2012, cuando Johnny Depp y Amber Heard comenzaron su romance durante el rodaje de The Rum Diary. Para 2015 años ya estaban casados y un año más tarde se separaron, con la güereja metiéndole al Jack Sparrow una orden de restricción por violencia doméstica.
Cobijada por el movimiento MeeToo, Amber Heard acusó públicamente a Johnny Depp de ser un novio abusivo y golpeador. Incluso sacó un artículo
donde hablaba en contra del abuso y contaba que tras acusar a Depp los estudios le cerraron las puertas y recibió amenazas de muerte.Pero, pero, pero… en 2019 Johnny contrademandó a Amber por 50 millones de dólares por difamación (seguro se consiguió un abogangster como el de Marriage Story). Alegó que la abusadora era ella, pues no sólo le arrojó toda variedad de botellas durante sus peleas, sino que una de ellas terminó rebanándole un dedo que pudo ser reconstruido tras cuatro operaciones.
Lo peor fue cuando, según Depp, su ex esposa le dejó dos tremendos pedazos de popó en las sábanas de su cama, como una mala broma antes de irse a Coachella con una amiga. Ahí fue cuando el actor decidió separarse.
Todo el asunto terminó con un acuerdo extrajudicial en donde Amber retiró la acusación por violencia doméstica y le sacó 7 millones a Depp (los cuales donó a la caridad). Johnny Depp, por su parte, se apartó de los reflectores mientras todos le cantaban la de “abusadora, abusadora”.
Ahora que las grabaciones han salido a la luz, el público vuelve a cambiar de opinión y ya pintan a Johnny como un santo y a Heard como una villana, engatuzadora, malvada, golpeamaridos. Lo cierto es que este chismazo amenaza con ponerse más bueno en una telenovela que nos demuestra que, en ocasiones, los pobrecitos hombres también sufren.
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