Sinaloa.- El Congreso de Sinaloa aprobó por unanimidad la “Ley Anti-Chancla”, o sea que en dicho estado tu santa jefecita ya no puede castigarte conforme a las sagradas tradiciones mexicanas: aventándote un certero, justiciero y ejemplar chanclazo cada vez que te portes mal.
Aunque popularmente se conoce como “Ley Anti-Chancla”, lo que queda prohibido es que los morritos sean maltratados físicamente, eso incluye jalones de pelos, pellizcos, cocos, cinturonazos, escobazos o cualquier tipo de castigo corporal.
Así que nada de “con el palo que utiliza el castigo te horroriza, y después de la paliza me voy a morir de risa”, pues esas prácticas ya son del siglo pasado, o sea, jelou. Pero una cosa es lo que dice la ley, y otra es lo que dice la ley de tu mamá y su inquebrantable consigna: “mi casa, mis reglas, y si no te gusta, la puerta está muy ancha”.
En el nuevo código se puede leer que la “Ley Anti-Chancla” consiste en: “Abstenerse de cualquier atentado contra su integridad física, psicológica o actos que menoscaben su desarrollo integral; así como de ejercer cualquier tipo de violencia en su contra, en particular el castigo corporal”.
Ahora hagan equipos de tres y discutan si es una ley justa o si el mundo ya es muy frágil. De un lado pónganse los que opinen que “debemos erradicar toda violencia y educar a nuestros niños con la empatía y el diálogo”, y del otro lado los que opinen que “nel, a los chamacos malcriados hay que darles un zape para que se eduquen”, y discutan hasta que les duela los dedos de tanto escribir.
"Ahorita llega la novia, tía"
RECLAMONAMENTE CIERTO
BOCONAMENTE REAL
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