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Porque todos tuvimos MySpace, te mostramos el pasado metalero de la que no es Carla Morrison

Sáquense unas líneas de delineador negro y morado

Plantilla de estrellas moradas en Myspace.- ¿Cuántos de nosotros no tenemos un pasado oscuro emo darks con camiseta del Ché Guevara y libro de “Los hornos de Hitler” que nos avergüenza, y que además está plasmado en las tenebrosas páginas de Myspace, si es que todavía recuerdas tu contraseña… La respuesta es “todos menos yo”.

Es vergonzoso cuando alguien encuentra tus viejas fotos de perfil en redes sociales ahora extintas, para mostrárselas a un público que no sabe apreciar las estrellas moradas con brillos y largos flecos que tapaban tus inseguridades y tus asquerosos barros en la frente.

Es todavía peor cuando eres esa cantante que no es Natalia Lafourcade, que tampoco es Carla Morrison, y que tampoco es Lila Downs para usar tantas flores. Estamos hablando de Mon Lafertetete, cantante chilena a la que acabamos de encontrarle un pasado “déjenme, esta soy yo, no es una etapa, quiero usar mallitas de red por siempre”.

Gracias a fuentes tipográficas vinculadas con la redacción de nuestro portal, llegó hasta nosotros el pasado metalero de Mónica Andrea Bárbara Laferte de la Cruz

, quien solía ser la principal vocalista de Mystica Girls, una banda de puras chicas que tocaban metal en inglés y español, y quienes obviamente se basaron en un tutorial para hacer su logo de banda metalera bien rudo y jarcor parecido al que nosotros hicimos.

Esta agrupación metalera es mexicana, tienen alrededor de 10 años en la escena de chicas con pelo morado y azul, y tenían entre sus filas a doña Laferte, quien se apartó de sus compañeras para realizar su carrera como solista.

En la escala de Myspace a Hi5 a MetroFLOG a principios de Facebook, ¿qué tan avergonzada estará Mon Laferte de este pasado rudo de calaveritas, ropa negra, delineador negro, falditas y chamarras gastadas?

Nuestros expertos aseguran que nada avergonzada, pues seguramente está gozando de sus millones de dólares en Miami sin importarle ninguna de las publicaciones que hacemos la clase trabajadora a su nombre.

Redacción