Cabina de los lamentos.- A un ciudadano no le dejaron salir sonriendo en su licencia de conducir, y pues parece que ahora el gobierno va a controlar nuestros sentimientos.
La inédita restricción sucedió en la República Checa, mejor conocida por los chavorrucos nostálgicos como “Checoslovaquia”, donde a un sujeto le impidieron salir sonriendo en dicho documento oficial por más que quiso hacer valer su derecho como ciudadano pleno.
Y es que las sombrías leyes bohemias establecen que las autoridades de Praga pueden rehusarse a expedir un documento si las personas salen “expresando sus sentimientos”, estableciendo así mismo que deben tener expresiones naturales en sus documentos de identificación, y pues ya sabemos a qué país le urgen comediantes.
Fue tanto el enojo del individuo por no poder salir feliz, feliz, feliz en su credencial, que éste apeló ante la Corte Constitucional (así le dicen los checos a la “Suprema Corte”) para apelar a su derecho de reír cuando le venga en gana.
Antes de llevar su caso ante la máxima autoridad jurisdiccional de su país, el sonriente individuo intentó presentar una queja ante la Corte Municipal de Praga, la cual desestimo su demanda argumentando que los derechos fundamentales de una persona no incluyen el ir en contra de normas establecidas argumentando “objeción de conciencia”.
Hasta el momento, la Corte no ha emitido su falla para ver si se le otorga la exención para salir sonriendo en su documento oficial a pesar de lo que diga una tonta ley, pero estaremos atentos a la resolución, of course.
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