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Captan a estrella rusa del patinaje viviendo en las calles de Jalisco

Te contamos cómo llegó a esto

Calles Congeladas.- Una exestrella del patinaje rusa fue captada viviendo en las calles de Jalisco como indigente y sabrá Dios qué pasó con ella para llegar a eso.

Se trata de Elena Gouliakova, excampeona rusa de dicha disciplina, quien ahora deambula por las calles del municipio de Tepatitlán en el estado de Jalisco.

Pasó del patinaje artístico a vivir en la indigencia

@alejandromartinez3600RUSA SE ENCUENTRA VIVIENDO EN LAS CALLES DE MEXICO DESDE HACE MÁS DE 15 AÑOS. AL PARECER TUVO UN FUERTE CHOQUE EMOCIONAL QUE LA DEJÓ MAL PERO LO ÚNICO QUE ANHELA AHORA ES PODER LOCALIZAR A SU FAMILIA Y VOLVER A SU PAÍS. UNÁMONOS EN 👉 su búsqueda de familiares♬ Get You The Moon – Kina

La historia de Elena es en verdad trágica ya que ella llegó a nuestro país en el año 2001 junto a su entonces esposo Nikolay Suetov,  con la intención de emprender proyectos para impulsar dicho deporte en nuestro país.

En algún punto de su travesía, lograron establecerse en el Deportivo San Agustín de Monterrey, e incluso llegaron a formar parte de la Asociación de Deportes Invernales del Estado (sí, existe alguna “asociación invernal de deportes” en Nuevo León) y de la Federación Mexicana de Patinaje Sobre Hielo y Deportes de Invierno.

La cosa se habría descontrolado en 2005 cuando la extranjera fue diagnosticada con enfermedades mentales, lo que provocó que su marido la abandonara, y desde entonces empezó a vivir situaciones de calle.

Gouliakova habría sido recluida en el área psiquiátrica del Penal de Topo Chico por causas que no están del todo claras, aunque eventualmente le fue otorgada su libertad.

Es así que ahora tras varios años “desaparecida”, ha sido vista justo en el municipio jalisciense en un lamentable estado seguramente provocado por las enfermedades que padece.

Varios habitantes del lugar ubican perfectamente a la mujer, e incluso una tiktoker dueña de un café internet asegura que Elena va seguido al lugar a hacer varias búsquedas en Google y luego se va, metiéndole más misterio a la cosa.

Adolfo Santino