Increíble pero cierto

Arquitectos confiables presenta: abren un 7 Eleven sin entrada ni estacionamiento

A lo mejor hay que llegar en paracaídas

Infierno Geométrico.- Usuarios de las redes han reportado que una tienda 7-Eleven no tiene ni entrada ni estacionamiento, ni pies ni cabeza, y a lo mejor es un portal para ir a otros mundos.

Fue en TikTok en donde el usuario @amorlarios compartió el video en el que se ve la tienda recién inaugurada con el pequeño detalle que el estacionamiento no apunta a ningún lado, y la entrada no tienen ninguna lógica al menos que los clientes vengan en zancos.

La entrada ha de ser por otra dimensión

Al clip le agregó el diálogo genérico de Bob Esponja que últimamente le ponen a todas las publicaciones de TikTok y que confirma que la gente cada día es más creativa en las redes.

“Cuando contratan al arquitecto que se graduó online para hacer el estacionamiento. ¡¿Por dónde entro?!”, se lee en la descripción del video que ya tiene más de 700 mil reproducciones, aprovechando que la gente ve varias veces el mismo video.

@amorlarios #seveneleven #zapopanjalisco #estacionamiento #guadalajara #online #tikrok @miauscangaa ♬ el que use este audio es normal – Ntsl

Como se puede ver en las imágenes, las líneas de estacionamiento no tienen lógica alguna, además de que hay árboles afuera que impedirían el acceso de cualquier auto, lo que puede ser una señal de que los quieren podar “a la sorda” un día en la noche, ahí por si quieren etiquetar a la PROESPA.

La distribución tan extraña del estacionamiento nos habla de que tal vez es uno de esos casos donde los arquitectos engañan a la autoridades de desarrollo urbano para que les den el permiso de construcción “cumpliendo” con el número de cajones de estacionamiento aunque sean inviables, o como en este caso, físicamente imposible de acceder a ellos. De hecho, esta ha de ser la razón. Los cachamos.

Hablado de cosas inexplicables: Al vocalista de Caló se le cayó en pleno escenario una bolsita con un polvito extraño y parece que es un homenaje a Mario Bezares.

Adolfo Santino