El Edison mexicano: conoce a Fausto Celorio, el inventor de la máquina para hacer tortillas

¿Qué sería de nuestra vida sin la tortillita con sal?

Paraíso Chirriante.- Cuando hablamos de inventores mexicanos, se nos viene a la mente el nombre de Guillermo González Camarena y nos duele el estómago por saber lo que pasó. Sin embargo, hay otro genio mexicano que registró más de 150 patentes durante su vida incluyendo la máquina para hacer tortillas, sin la cual no podríamos vivir.

Su nombre es Fausto Celorio, y a él le debemos todo el sistema actual de venta de tortillas que se hacen con las clásicas máquinas que amoldan la masa, las van pasando por rodillos para calentarlas hasta que nos las entregan listas para ponerle poquita sal, hacerla rollito y degustarla.

Antes del invento de don Fausto, la única manera de hacer tortillas era amasando la masa (después de bajarse pa’ abajo) y hechas a manos con metate y comal, que si bien son una delicia, su proceso de elaboración era mucho más caro y tardado, por no decir doloroso para la espalda…

Este inventor sí se puede ver

El invento de Celorio llegó en 1947 cuando implementó un sistema de rodillos para troquelar y transportar la tortilla. La máquina permitía aplastar la masa laminada y cortada para tomar la clásica forma de disco. Después la tortilla es transportada en una banda a tres hornos, para finalmente salir.

Eso después de que se realiza el proceso de nixtamalización, que consiste en mezclar el maíz con cal viva y agua. Esa mezcla es llevaba a la molienda (parte del invento del “Edison mexicano”) donde se producen las tortillas.

Si bien, en 1904, dos mexicanos de nombres Everardo Rodríguez y Luis Romero ya habían ideado un aparato que produjera tortillas de forma masiva, este no tenía la industrialización que el de Fausto, y curiosamente producía tortillas cuadradas, que no fueron bien recibidas por la población de ese entonces (y seguramente tampoco ahorita).

El invento de este mexicano fue perfeccionado por el mismo Celorio en 1995, creando una máquina más pequeña capaz de producir 131 kg de tortilla por hora que tenía encendido eléctrico. Hasta el día de hoy se han vendido más de 100 millones de estos aparatos para crear tortillas en todo el mundo, por si creían que solo hay que hablar del éxito del Checo Pérez.

¿Por qué nadie ha mejorado este invento para que no haga ruidos como película de terror? Es algo para lo que no tenemos respuesta…

Hablando de focos y penumbras: un electricista cortó la luz de todo un pueblo para poder visitar a su novia sin que nadie los viera.