Existe un barco abandonado de McDonald’s y da más miedo que el contenido de las hamburguesas

Dudo que vendan “cajitas felices” a bordo

McPlaya Abandonada.- Esta es la historia que nadie sabe y nadie supo del restaurante flotante de McDonald’s que nunca funcionó pero que sigue ahí encallado en espera de un día funcionar.

Se trata del  McBarge, el barco de McDonald’s que fue presentado en la Feria Mundial en Vancouver (esta no tiene esfera solar ni pelucas) en 1986, mismo que maravilló a los participantes de aquel entonces por las posibilidades que se abrían al poder pedir un “Cuarto de libra” a bordo y gracias al movimiento de barco vaciar el estómago antes de la digestión.

Pero el proyecto fue abandonado y el bote fue llevado al puerto de Burrard, donde yace desde entonces como recuerdo de tiempos mejores, o mejor dicho, “de lo que nunca fue”, como diría el poeta.

¿Se imaginan comer una hamburguesa de McDonald’s en un barco?

La embarcación mide casi 90 metros de eslora (si no usamos lenguaje náutico al hablar de un barco, explotamos) y se ha convertido en un “barco fantasma” lleno de óxido, grafitis y suciedad, e incluso hace algunos años se lanzó un grupo en Facebook que tenía la intención de juntar fondos para “salvar al McBarge”.

El proyecto de McDonald’s costó en su momento 9 millones de dólares, unos 20 millones actuales (para los que siguen contando la taquilla del cine sin tomar en cuenta la inflación o el número de salas de cine actuales) y se calcula que costaría 5 millones de dólares entre reparaciones, mejoras y aromatizantes, nomás para echarlo a andar.

El enorme armatoste fue comprado en 2010 por el empresario Howard Meakin quien prometió repararlo para que un día pueda operar, y aunque el barco fue devuelto al puerto de Vancouver, sigue ahí encallado y sin funcionar a merced de los vagos, cangrejos y jugadores iracundos de hockey.

Ya que andamos con historias increíbles: Un vato le escribió a su ex para pedirle la contraseña del Netflix y la cosa acabó mejor de lo que pensó