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La raza andaba indignada porque pusieron un Quetzalcóatl en un libro pero ya les contestó la SEP

Ahora sí se la rifó el encargado de redes de la SEP

Colina Laica.- Un sujeto exhibió a la SEP por haber usado un Quetzalcóatl en la portada de un “libro de texto”, bajo el argumento de que la figura es una deidad prehispánica y por lo tanto, se alteraba la laicidad de la educación pública que por mandato constitucional debe tener cualquier cosa derivada del Estado.

La publicación sería rápidamente retuiteada centenas de veces debido a que en efecto, sí parece que se trataba de un libro que los chavos tendrán que cargar en el mochila, pero no fue así.

En teoría, el vato estaba bien, con la salvedad que el libro en cuestión no era un libro de texto (de los que se distribuyen gratuitamente entre los estudiantes) sino un panfleto (para usar las palabras de este sexenio) para conmemorar el 40 aniversario de la creación del INEA.

Así le contestó el community manager de la SEP al sujeto, ahora sí sacándose un 10:

“Buen día, Carlos. Te informamos que no se trata de un libro de texto, es material fotográfico específico para la conmemoración del 40 aniversario de la creación del

@INEAmx como puedes apreciar en el título de la portada. Esperamos haber esclarecido tu duda”.

Más allá de que media población este esperando el material fotográfico compilado para celebrar los 40 años de la existencia de un INEA, la edición en efecto no se va a repartir entre los alumnos de educación básico, que hubiera implicado en efecto una violación al estado laico, cosa que no sucedió así.

Aún así, queda la curiosidad de saber qué pasaría si en lugar de elegir una deidad vengativa que exige sacrificios humanos a sus adoradores hubieran puesto a un Arcángel o un santo. Seguramente ahí sí causaría “indignación” generalizada.

Haciéndola de sabueso, la realidad es que sí tienen al Quetzalcóatl en mención en el banner oficial de la dependencia federal…

https://twitter.com/SEP_mx?s=20

Y por si no la viste: Ya supimos en qué anda Alizée y no tiene nada que ver con la cantada.

Adolfo Santino