México.- Yordi Cobo Oceguera, pacheco local de 34 años que vive en casa de sus papás y gasta la mitad de su salario en distintos tipos de cepas de mota (o cannabis), aseguró esta mañana que dicha planta no genera adicción y le permite llevar una vida perfectamente normal.
Yordi, quien compra de 3 a 6 onzas de mota mensualmente, más derivados y comestibles así como otras sustancias tóxicas, solicitó enfurecidamente que se dejara de consumir a los criminalizadores de la cannabis y exigió que esta se legalizara inmediatamente.
La indignación de Yordi derivó de que el joven escuchara uno de los comerciales del gobierno en el que, tras un deprimente testimonio, diversos adictos aseguran que el mundo de las drogas no tiene un final feliz. Yordi escuchó este comercial hace cuatro meses, pero apenas reaccionó al mismo.
Por su parte, la mamá de Yordi, la señora Marcela Oceguera, manifestó estar en desacuerdo con su primogénito mediante una sesión de regañiza no exenta de varios chanclazos
y la advertencia de que “si vuelves a meter esas porquerías aquí, te vas de mi casa”.Más tarde, Yordi se curó el dolor con unos toques y se dispuso a pedir sus provisiones mensuales: dos oz. de Pinneaple Express OG-47, otras dos de Sweet Candy Crush, 500 pesos de la standard y 50 pesitos de la panteonera. Cuando su dealer llegó en su auto último modelo y le ofreció un cigarro (de tabaco). Yordi lo rechazó pues “esas ching**eras hacen daño”.
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¿POR QUÉ HABRÁ SIDO? PERO CIERTO
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