9 muy mexicanas medidas con las que hubieran evitado entrar al Capitolio

Eso pasa por no tener la lona colgada de VECINO VIGILANTE

Capitolio si ves algo, dilo.- Hace unas horas, en Estados Unidos de Norteamérica, que por sus siglas en inglés se pronuncia YUSA, se armó un alboroto tal en su Capitolio, que todo el mundo puso sus ojos sobre el país vecino del norte con palomita en mano para ver qué chismes pasaban.

El Capitolio ya no es lo que era

Todo porque su exlíder, McDonald’s Trump, dijo sutilmente que la hicieran de pedo, pero minutos después de que todos realmente la hicieran de pedo, dijo, “no bueno, o sea no tanto, o sea ya paz para todos, chale qué hice” pero pues la gente no entendió y siguió haciendo su tiradero.

Durante horas, los fans de Trump se metieron como Juan por su casa hasta la cocina gringa, donde muchos presidentes desayunaron en su momento la ya conocida papayita con queso cottage antes de seguir dominando al mundo.

Todo esto pasó, claro, porque no conocen de las medidas de seguridad mexicanas, unas que realmente evitan que cualquier invasor traspase los límites, ¿que de cuáles hablamos?

Bueno, pues de estos sencillos trucos que solo México conoce y hubieran funcionado en el desmadre del Capitolio:

La vecina vigía

La que siempre anda viendo quién entra y sale y a qué horas y con quién o cómo. (Incluye perico en el lavadero)

El perro en la azotea

Ese el que siempre le ladra a todos los que pasan, hasta a su sombra, si trae puesta una playera del Cruz Azul, impone más.

Cámaras de vigilancia (de las que no son reales, las pro del Capitolio no jalan)

Unas que nunca son reales pero aparentan serlo, todos lo sabemos, pero todos lo creemos real.

La poderosa lona de VECINO VIGILANTE TE ESTAMOS OBSERVANDO

Así nadie jamás traspasará los límites de una América libre. Cuidado, delincuente, cuidado.

Los ya clásicos pedazos de vidrio sobre la barda

Inquebrantable.

El velador

Ese héroe nocturno que se da sus rondines y que solo te responde con un NO JOVEN, AQUÍ ES VIGILANCIA HASTA EL LUNES LLEGAN LOS DE LAS OFICINAS.

 

O bien, su contraparte, el poli de la entrada que no te deja pasar sin credencial.

Dejar la luz prendida en el Capitolio

Todo ladrón sabe que si está una luz prendida, hay gente en la casa y mejor se van, siempre pasa.

Y si nada de esto jala, pídele al vecino que “le eche un ojo a la casa” por si acaso.

Y para calmar el susto del alboroto en el Capitolio, entérate de cómo todo fueron grabaciones para promocionar Guerra Mundial Z 2.

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