Navidarks – Dicen que uno no valora lo que tiene hasta que lo pierde y la verdad es que no hay frase que describa mejor esta cuarentena que se extendió hasta la temporada navideña. Ahora que llevamos meses sin ver a nuestros compañeros de la oficina mas que en videollamada, valoramos lo que teníamos antes.
Un día alguien calentó pescado y dejó apestosa toda la oficina sin saber que sería la última vez que lo haría. Éramos infelices y lo sabíamos, pero igual se extraña el ritual Godínez de la temporada navideña. Ahora que nuestra única compañía son nuestras mascotas y nuestros propios abismos interiores, los dejamos con esta lista de cosas que antes odiábamos y ahora casi casi necesitamos.
Para muchos, las fiestas de la oficina eran su única oportunidad de salir de fiesta, por lo que se destrampaban y soltaban netas o hacían el oso de formas que todos recordaban a lo largo del año.
Nada mejor para reforzar el compañerismo en las oficinas como que te regalen algo que tú pediste explícitamente y que de hecho pudiste haber comprado tú mismo con tu dinero.
En ese momento te daba cringe tener que saludar a tus familiares incómodos pero a más de 6 meses de tu último abrazo hasta le piensas.
O sea, todavía te pueden preguntar pero ya puedes fingir que te quedaste sin señal y no contestar. Los pequeños lujos de la tecnología, ¿no?
Jajaja no, espera, todavía están así. Supongo que lo que se extraña es cuando era normal y no alarmante que estuviera así.
“Jaja gracias por estos calcetines que evidentemente jamás usaría, cosa que sabes y aún así te valió queso porque importa más el protocolo que nuestros verdaderos sentimientos”. Es todo un sentimiento específico.
El asunto con las rifas siempre termina con decepción, pero la esperanza de ganarte algo es más adictiva que el crico.
A tus compañeros de oficina los ves reír, comer y salir llorando del baño, pero hay algo de especial en verlos cantando dándolo todo en esta clase de posadas.
Jaja un clásico, ¿a poco no? ¿No…? ¿Nadie más?
La visión de las señoras caminando con velas por toda la colonia no nos perseguirá este año y se va a extrañar la sensación de inquietud que generaban.
Los que lanzaron petardos se quedaron sin regalos... y sin la amistad de los vecinos
Así se consiente despues de una noche ajetreada
Después de NocheBuena debería haber un fin de semana para recuperarse
"Hay que irlos pensando porque luego nos agarran las prisas con las uvas", arengó una…
CAÓTICAMENTE REAL
MADRUGUETE PERO CIERTO