TV Azteca presenta – El empresario Ricardo Salinas Pliego parece estar en una contienda en contra de sí mismo para convertirse en la persona más odiada del país. En un nuevo movimiento que rivaliza con el Sr. Burns, Salinas Pliego se metió con una ex-empleada y la llamó malagradecida.
El pleito, por supuesto, ocurrió en ese cuadrilatero del Internet llamado Twitter. Ahí Ricardo Salinas Pliego estaba tuiteando de lo más tranquilo acerca de la prosperidad cuando el pueblo atacó. Vamos por partes.
Todo comenzó con este tuit donde uno de los hombres más ricos del país habla de crear prosperidad y luego recomienda un libro que con todo gusto leeríamos si no estuviéramos muy ocupados trabajando.
Pero no contaba con que la furia del pueblo está latente. México tiene hambre de justicia y así lo demostró Lupita Riojas, quien le reclamó que mucha plática de prosperidad, pero su empresa la despidió en plena pandemia siendo ella población vulnerable y luego de dedicarles 18 años de su vida.
Y si creían que Ricardo Salinas Pliego se iba a sentir culpable de que su empresa despidió a una persona vulnerable en plena pandemia, es porque no saben que el cinismo de algunos empresarios mexicanos no conoce límites.
No conforme con decirle malagradecida (como si el trabajo fuera un favor y no un contrato), le dijo que la habría corrido antes si hubiera podido.
Esto no le cayó nada bien a los usuarios de Twitter, que corrieron a amenazarlo con GIFs de guillotinas, se propusieron hacerle brujería y le pusieron una mega cancelada como pocas veces se ha visto. Solo hemos visto esta clase de canceladas cuando Salinas Pliego dice algo.
Muchos todavía tienen fresco que el empresario se negó muy públicamente a cerrar sus tiendas durante la cuarentena, contradijo las indicaciones de salubridad de San López-Gatell y todavía puso a Javier Alatorre a decir que no le hiciéramos caso.
ORGULLO NACIONAL PERO CIERTO
"No creo que las familias estén con ánimo de partir el pavo", dedujo la líder…
REVELADAMENTE REAL
ES REAL
Es lo que muchos trabajadores esperaban para no volver en diciembre
LERO, LERO PERO CIERTO