Cuarentena de la repetición.- Hace 9 años el mundo se quedó boquiabierto cuando la señora Cecilia Giménez restauró a medias la pintura Ecce Homo de Elías García Martínez. El resultado se convirtió en un meme y además sin quererlo reactivó la economía de todo su pueblo pues ahora recibe millones de euros por la derrama turística:
Bueno, pues esa misma técnica, que podríamos llamarle, de restauración Ecce Homo volvió a ponerse en práctica recientemente con esta copia de las Inmaculadas de Bartolomé Esteban Murillo. Su dueño, un coleccionesta de Sevilla, España. Según se ha informado, el resultado ocurrió porque el restaurador no era profesional, sino un reparador de muebles.
Lo peor de esta situación es que cuando el coleccionista de Sevilla quiso reclamarle al restaurador de muebles (?) que hizo un mal trabajo con su obra de arte antigua, el autor de esta obra homenaje al Ecce Homo le dijo que le diera otra oportunidad y lo convirtió en esto:
Supuestamente, al final de esta historia, el coleccionista de Sevilla llevó su cuadro a un tercer trabajo de restauración, esta vez, con un profesional que dejó la pintura todavía desfigurada y sin ningún tipo de forma o valor artístico. O bueno, sí, como Ecce Homo.
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ANTÍPODAMENTE REAL
EXTRANJERAMENTE CIERTO