Plataforma del Prestamista.- El tiempo muerto que estamos viviendo en casa sin poderlo rellenar nos hace pensar de más en cosas que normalmente no le pondríamos tanta atención, como por ejemplo, la película de ‘El Hoyo‘, la cual aún no ha sido traducida al mexicano por razones desconocidas.
La película trata de una cárcel vertical en donde se le pasa un banquete a los reos, los cuales se atascan como si fuera buffete de Primera Comunión y no le dejan nada a los de los pisos inferiores, pero por ello, hemos pensado en alimentos que de haberse puesto en la plataforma, llegarían a los desdichados de más abajo sin ningún problema:
1. ¿Quieren que la comida alcance para todos? Mándenles tacos de sesos.
2. La ensalada de col del pollo de Memphis. Esa vuelve a ‘la administración’ sin p2. La colifolor es el mensaje.
3. El betabel. SI lo ponen, no sólo nadie lo come, si no que con eso evitan que los prisioneros se suban a la plataforma, no vayan a embarrarse de la cosa morada.
4. Pónganle pepinillos a las hamburguesas, y les devuelven el platillo con todo y cajita feliz. Ese sabor infernal se queda impregnada a la comida y cada bocado sabe a pepinillo aunque se los quites.
5. Supongamos que ninguno de los reos es chilango. De ser cierta la suposición, que les pongan una bazofia metida en un bolillo, y ahí se queda.
6. Avísenles que alguien de la barra del América preparó la comida, para que vean como si rinde…
7. Pónganles sushi de verdad, con todo y pescado crudo para que vean que sí alcanza la comida para todos.
8. En general toda la cerveza light sobreviviría el periplo por la cárcel, a menos que haya algún regio cariñoso con sus primas que ande por ahí.
9. La sopa de champiñones se queda porque se queda. El único problema es que si alguien la prueba por error va a vomitar sobre toda la plataforma dejando la panacota inservible.
"Si así se ponen por unos bollos, no quiero ni pensar cuando instalemos Taco Bell…
DESESPERADAMENTE REAL
COLONIZADORAMENTE CIERTO
Además de cena en casa ajena, conocerán a las sobrinas del patrón
Lo usaron de medio de transporte hasta el valle que la nieve cubrió
"¿Cómo vas, ma'? ¿Ya hay buñuelos?", preguntó un chavo todavía en pijama