Reclusorio Sur.- Los chilangos y en general los mexicanos sabemos que el futbol está cambiando constantemente, por lo que a nadie le extrañaría que hoy los Pumas se impusieran ante su odiado rival y frecuente vencedor, el América. Además de que el equipo de Coapa tiene varios lesionados con los que no podrán contar, tampoco podrá tener el apoyo moral de su estrella Renato Ibarra… porque está detenido en el Ministerio Público No.2 en la delegación Tlalpan.
Lo más indignante del asunto es que Renato Ibarra fue detenido junto a otras 5 personas de origen ecuatoriano, luego de un incidente de violencia familiar donde presuntamente el futbolista golpeó a su esposa embarazada y a su cuñada. Todavía se le está tomando declaración a todos, pero es probable que el jugador de América sea vinculado a proceso.
Si bien los americanistas están súper tristes, quienes se alegraron fueron los compañeros de celda del presunto golpeador de mujeres embarazadas. Los presuntos delincuentes que comparten cuarto con Renato Ibarra se dijeron contentos de que les tocara un golpeador, pues a ellos se les de una bienvenida más cálida.
“¡N’ombre! Qué bueno que nos enteramos que a este moreno le gusta andar molestando a las damas y más a días del día que debería recordarle a todos que ellas son intocables, el dia de la mujer. Además fue a caer en la celda más feminista y en la que nos gustan los nalgones”, declara el compañero de celda Imotep Jarioso.
Renato Ibarra ya se comunicó para decir que nunca le levantaría la mano a una mujer
Dice Orvañanos y digo yo también que no le creemos nada:
Ahora, ya en el terreno del chisme, tenemos fuentes brotantes que nos indican que la pelea de Renato y su pareja embarazada se originó porque Ibarra no pudo aceptar que sus glúteos no son los mejores de la relación, lo que lo llevó a violentar la situación.
"Si así se ponen por unos bollos, no quiero ni pensar cuando instalemos Taco Bell…
DESESPERADAMENTE REAL
COLONIZADORAMENTE CIERTO
Además de cena en casa ajena, conocerán a las sobrinas del patrón
Lo usaron de medio de transporte hasta el valle que la nieve cubrió
"¿Cómo vas, ma'? ¿Ya hay buñuelos?", preguntó un chavo todavía en pijama