México.- A lo largo y ancho del país, un espíritu se hace presente. Es el espíritu del emprendimiento, el cual cada vez más empapa a los mexicanos con ganas de empezar su propio negocio. Pero, ¿cómo saber cuáles son los pasos de un buen emprendimiento?
Por ello, el Departamento de Mercadología del Deforma contactó al viejo sabio de la región del Norte del País, quien recibe el nombre de Don Nacho Reyna. Él, acompañado de su sabiduría infinita, nos reveló la guía de tres pasos para tener un emprendimiento afortunado.
Mire, lo primero es identificar un lugar y una necesidad. Por ejemplo, ahí donde veas que la banda se reúne podrías poner Tosticentros, apúntele bien compa, así es, uno de esos donde hay Tostitos preparados. Si le añades ingenio y sabor, podrías ponerle cacahuates, pepino, hasta chicharrón y carnita asada. Eso podrá llevarte a ganarte el corazón de la clientela.
Es más, si quieres saber más ingredientes, te comparto este recetario
para maestros del Tostito.Si tu Tosticentro comienza a crecer, puedes dar el paso de tu vida y contactar directamente a los repartidores de Sabritas (llamando al 800-9010-500), con lo cual podrás comprar más producto y así economizar gastos.Ponte pila y aprovecha todas las herramientas de la página de Tosticentros.
Ahora estás en la ruta para convertirte en tu propio Jefe de Jefes.
Ya que el jale se ponga machín, es momento de expandirte y recordar que puedes poner tantos Tosticentros como puedas, campeón. Ojalá te vaya tan bien que venga gente de Tamaulipas, de Coahuila o de los United para probar tu manjar. De esta manera, podrás contratar raza para que te ayude e impulsar su crecimiento. Recuerda que no hay mejor emprendedor que aquel que reparte su éxito.
Así que ya lo sabes, si quieres comenzar tu aventura con Tosticentros, puedes hacerlo en este enlace, o echarle un ojo a este video. El futuro está en tus manos, compa:
CIVILIZADAMENTE REAL
VUELA ALTO, HÉROE
IRREFUTABLEMENTE REAL
CREEPY PERO CIERTO
"Yo sabía que su nieto iba a ser grande entre los grandes", comentó Marco Antonio…
CONYUGALMENTE REAL