“No los visitamos porque siguen hablando de Mauricio Clark”, revelan alienígenas

Además de Mauricio Clark, la existencia de Monterrey es otra razón de peso.

Area 51 – La principal razón por la que los aliens no nos visitan es porque seguimos obsesionados con Mauricio Clark, aseguró una inteligencia superior alienígena a uno de los becarios del Deforma que se le apareció en un sueño que para nada tiene que ver con la mota que fumo antes de acostarse..

Aunque si no existiera Mauricio Clark, tampoco nos visitarían, pues la sola existencia de Monterrey y sus leyes mochas hacen que no se les antoje bajar a compartir su tecnología avanzada de la Quinta Dimensión.

De acuerdo con esta entidad alienígena, la sociedad debió haber aceptado hace mucho tiempo que la homosexualidad no es una enfermedad y por lo tanto no puede “curarse” o revertirse, y que nuestra obsesión con la sed de atención con ese sujeto sólo juega en nuestra contra.

“Somos seres súper avanzados con 35 sexos simultáneos, ¿ustedes creen que llegamos a este punto clavándonos con celebridades olvidadas? Es obvio que como civilización no han pasado del estadio en donde se obsesionan con noticias sensacionalistas del espectáculo y está de hueva platicar así”, recriminó el alienígena. “¿Para qué quieren que los visitemos? ¿Para que se pongan a platicarnos del chisme de José José? De hueva su civilización, amiga”, agregó en una frecuencia de existencia visiblemente alterada.

Asimismo, La Entidad expresó que todavía quedan rincones completamente ajenos al avance, el progreso y la civilización, como es el caso de Monterrey. Una ciudad aparentemente avanzada, con unos cuantos edificios y algo de industria, pero con leyes conservadoras que la convierten en un verdadero artefacto ancestral en cuanto a legislación se refiere.

“Monterrey nos sirve para estudiar cómo eran las leyes hace 80 años, pero su sola existencia nos preocupa”, aseguró el aliencillo, quien accedió a ser entrevistado a cambio de unos pulparindos, la única cualidad redentoria de este planeta junto con el pop chileno y los perritos de la calle, según su opinión.

“¿Y por qué aman tanto a los payasos en Monterrey? Eso también está de no mames”, expresó mientras se comía un pulparindo.

Fuente: Lo soñé y sonaba chido we