13 finas técnicas que tenemos los mexicanos para comer garnachas y ser saludables
Nombrar la comida con diminutivos: “taquitos”, “pozolito”, “sopecitos”, “tamalitos”
México.- Quizás si la comida no fuera tan sabrosa y engordativa en México, todos estaríamos sanos, sin miedo de dar el botonazo y sin sufrir sobrepeso. Pero Diosito nos dio el regalo de las garnachas bien grasosas y ni modo que hacerles el feo.
La cuestión es que, a pesar de los peligros de comer tan atascadamente, en México hemos desarrollado útiles y prácticas estrategias para no subir tanto de peso. Tal vez esto no nos ayuda a bajar la panza, pero al menos nos ayuda a bajar nuestro sentimiento de culpa por comer tanto.
Así que ahora te diremos cuáles son estas 12 sofisticadas técnicas que debes aprender a aplicar para que no te pongas vientrudito. Si no funcionan a la primera, descuida, por lo menos te sentirás moralmente más delgado.
Vamos a ver:
1. Comer papalo quelite luego de echarte unos tacos súper grasosos
2. Nombrar la comida con diminutivos: “taquitos”, “pozolito”, “sopecitos”, “tamalitos”
3. Comer con la abuela, ella siempre nos ve flacos
4. Decirle “unos tacos” a todo lo que te tragaste antes de tu hora de comer. Ejemplo: “comeré poquito, porque me comí unos tacos hace rato”, traducción: “me atasqué de garnachas, pero de todos modos voy a comer un chingo de nuevo”.
5. Pedir tu capuchino grande con leche light y/o deslactosada
6. Decir “provechito”
7. Caminar lentamente de la fonda a la oficina “para bajar la panza y ayudar a la digestión”
8. Decirle “ensalada” a la comida que engorda. Ejemplo: “ensalada de cebolla, cilantro y piña con guarnición de carne”.