Biblioteca Pública.- —¿Y qué te pareció el libro de poesía que te presté? —Pues sentí que le faltaba más carnita y un mejor contenido, así que le puse mi taco en forma de separador, mira nomás qué belleza:
Quizás así fue la historia previa al enigmático manjar que apareció en un libro donado a una biblioteca de Indiana, Estados Unidos. La cosa es que una bibliotecaria encontró el peculiar separador y lo compartió en su chúirer:
La foto hizo enloquecer a miles de internautas y, como era de esperarse, se desató un debate sobre qué es más gratificante y glorioso: un buen libro o un buen taco. Aunque, la mera verdad, quizás este separador sí es una terrible falta de respeto, pues es una vil tostada gringa (the taquirou) todo chafa y sin alma.
Otra cosa sería si alguien hubiera utilizado un buen taco al pastor,
o, mínimo, uno de canasta. Sin embargo, esto ocurrió en los Yunaites, así que era complicado encontrar un buen taquito de separador.El libro fue una donación que apenas estaba pasando por el proceso de ser catalogado. ¿En dónde habrán de ubicar el libro: en la sección de literatura o en la de gastronomía? ¿El tacuo se utilizó como separador del libro o el libro se utilizó como plato para el taquito? ¿Y si le quitan el taco, será un libro destacado? (ba-du-tsss).
Dato curioso: llama la atención que se trata de un libro en verso. Así que otra usuaria buscó el libro en cuestión y descubrió que se trata de Canciones e historias sin sentido, una colección de poemas ilustrados del siglo XIX escritos por un autor inglés llamado Edwar Lear (al parecer, son cuentos en verso, como los de Tim Burton, pero no tan tenebrosos).
"Si así se ponen por unos bollos, no quiero ni pensar cuando instalemos Taco Bell…
DESESPERADAMENTE REAL
COLONIZADORAMENTE CIERTO
Además de cena en casa ajena, conocerán a las sobrinas del patrón
Lo usaron de medio de transporte hasta el valle que la nieve cubrió
"¿Cómo vas, ma'? ¿Ya hay buñuelos?", preguntó un chavo todavía en pijama