En notas que sólo a mí me importan, se murió Daniel Johnston :'(

Escribo esto mientras bebo café y leo buenos libros

México.- Estoy consciente que esto no es Marvin, Indie ROCKS! o Noisey como para que vengan a leer esta basura pretenciosa, pero dado que es viernes, no están los jefes y no tengo otra cosa que escribir, me permitiré contarles algo muy personal. Estoy muy triste porque murió Daniel Johnston.

Sí, ya sé.

No importa, de todos modos no entenderías. Deja tu comentario idiota y sal de la nota. Ahora, si te quedaste, te cuento que Daniel Johnston fue un músico texano muy querido entre la raza que se siente alternativa. Es mayormente conocido gracias al documental The Devil and Daniel Johnston y porque Kurt Cobain una vez usó una playera con la portada de su disco “Hi, How Are You”. Es considerado un pionero del género lo-fi.

Pero más allá de todos esos datos, debes saber que Daniel era un chico rechoncho, con el carácter de un niño y padecía esquizofrenia, por lo que varios periodos de su vida los pasó en instituciones psiquiátricas. Cuando no andaba en la locura, lo más probable es que estuviera encerrado en su cuarto (el sótano de sus papás), grabando chingos de rolas en casettes y haciendo dibujos.

Su música, aunque no se distinguió por ser virtuosa o bien producida, sí se caracterizó por… mmhh… precisamente por no ser virtuosa ni bien producida, sino hecha con los recursos mínimos y con mucho feeling. En los cotorreos de su pueblo, en Texas, vendía sus cintas, grabadas una por una, que incluían canciones con títulos como “Como un chango en el zoológico”, “Canción Odio”, “El amor verdadero te encontrará en el final”, “La historia de un artista” o “Gasparín”.

Cada casette traía una portada hecha a mano. Lo cual nos lleva a comentar que también dibujó machín, con el mismo espíritu infantil de su música y con una imaginación infinita. Su universo se pobló lo mismo de marcianos, animales, héroes de Marvel y demonios malvibrosos. Deben saber que también le entró a la mota y al ácido, lo cual incidió en sus padecimientos y en su arte.

En la última etapa de su vida, Daniel consiguió el reconocimiento que tanto merecía, aunque durante los últimos años su salud se complicó y fue hospitalizado hace poco. Hoy murió Daniel Johnston en su casa de Huston a los 58 años, víctima de un paro cardiaco.

La verdad no soy experto en Daniel Johnston. Pero una vez el Púas, mucho antes de que se hiciera famoso por hacerle una pregunta al Presidente, me recomendó el documental The Devil and Daniel Johnston. Cuando lo vi me fui de nalgas. La historia del morrito que “dio rienda a su demonios internos” me conmovió, pues deben saber que era un único y detergente que amaba las películas de Nolan, Tarantino y Von Trier. Además, la figura del artista caótico me recordó a mi carnal, quien a su modo ha tenido una vida similar a Daniel.

Ahora vuelvo a mi cuarto, a disfrutar de una tarde lluviosa, mientras leo café, bebo buenos libros y pienso en cómo masculinizar mi deconstrucción.

Salud.

Nota del Editor: Perdonen al becario, le dieron mucha mota cuando era bebé.