Palacio Nacional.- Quizás los más jóvenes no lo recuerden, pero en la alocada y lejana dédaca de los noventa existía un periodista llamado Nino Canún, que se aventaba largas horas en la televisión matutina, algo así como una “Galilea Montijo”, pero con rigor periodístico.
El caso es que los expresidentes de la mafia del poder le callaron la bocota y Nino tuvo que emigrar a la radio, donde alguno que otro taxista lo seguía sintonizando. Y así pasó casi dos décadas hasta que el régimen de AMLO entró triunfante y Nino Canún le expresó su amor en una mañanera:
Sin embargo, no hay amor que dure para siempre, y esta madrugada Nino Canún decidió irse a echar otra mañanera. Nuestro corresponsal del Deforma afirma que el sujeto iba con toda la actitud, bien trajeado, bien peinadito, con sus lentes bien puestos y su cara de querer brillar
nuevamente en la audiencia de reporteros.Sólo que [inserte sonido de violines tristes] AMLO no lo peló en toda la conferencia, y Nino Canún tuvo que aguantarse las ganas de aventarse un discurso aún más largo que el del propio presidente:
Fuentes de huachicol aseguran que Nino salió desconsolado de Palacio Nacional, y que volverá a todas las mañaneras de AMLO hasta que el presidente le haga caso por fin y le dé chance de hablar unos veinte minutitos, mínimo.
Una vez que salió herido de su orgullo este célebre periodista, el resto de los reporteros y del equipo de AMLO se pusieron a bailar todos juntos “Arremángala arrempújala” para disolver la tensión y hacer que la situación no fuera tan incómoda.
DESCARADAMENTE REAL
AUTÓMATAMENTE CIERTO
LAVADAMENTE REAL
Son las mismas que durante el año ponían la música a todo volumen
BILINGÜEMENTE REAL
Varios feligreses fueron testigos de los ruegos que hizo "la morenita del Tepeyac"