Doña María Cup – Increíblemente el Cruz Azul no echó a perder como acostumbra un partido crucial y por fin concreto un campeonato. Esto frente a los rayados dejándolos en ridículo y oficializando su estadio (ya que el estadio azul ya no existe) como el recinto deportivo más salado de la historia.
El equipo con más mala vibra por tradición, arrancó este torneo con todo el ánimo y actitud para (según ellos) demostrarle a sus amigos los que sí ganan torneos que también ellos pueden lograrlo.
El invicto iba bien, los goles también, todo marchaba viento en popa hasta que en algunas ocasiones veían su sueño con piedritas en el camino. Fracasos en alguna justa y empatar un clásico que iba a definir si eran verdaderos locales o sólo el roomie incómodo de las Águilas fueron algunos de los temas molestos.
Sin embargo, los conejos dejaron la madriguera para además de aprender a dormir en nido, ganar la siempre peleadísima y empoderadora Copa MX gracias a una que otra cosita que además de la suerte, los ayudó a definir.
Es casi Kafkiano ver como este conejo poco a poco se transforma en un ave altiva y poderosa para ahora hasta conseguir títulos que a nadie le importan pero títulos a fin de cuentas. Esperemos que esta situación no contribuya también en los indices delictivos o en que ya hasta quieran ganar la liga porque el mame sobre su perpetuo fracaso es algo que en verdad disfrutamos todos.
COLONIZADORAMENTE CIERTO
Además de cena en casa ajena, conocerán a las sobrinas del patrón
Lo usaron de medio de transporte hasta el valle que la nieve cubrió
"¿Cómo vas, ma'? ¿Ya hay buñuelos?", preguntó un chavo todavía en pijama
ESPLÉNDIDAMENTE REAL
MADURAMENTE REAL