Mundo del Internet.- Hace un par de meses, una chica llamada Maura T. Hennelly compartió en sus redes sociales la triste historia de su periquito Kiwi, quien se encontraba muy solo y parecía tener mala suerte en el amor.
Al principio, Maura le trajo una acompañante a Kwi, pero su relación no funcionó, o sea, no hubo clic, o nomás se la pasaban peleando, quién sabe. El caso es que mejor Kiwi se separó de su novia de entonces:
Tiempo después, Maura le llevó a Siouxsie, una periquita con aspecto gótico de la que Kiwi inmediatamente se enamoró y fue bien correspondido:
Aquí otras evidencias de su bello amor:
Superen eso, Rose y Jack:
Superen eso, Luismi e Issabela Camil:
Y aquí podríamos haber dicho que “fin” o “y vivieron felices para siempre”. Pero hace un par de días, Maura compartió que Kiwi y Siouxsie se dieron tanto cariño que, naturalmente, el fruto de ello fueron unos huevitos:
De donde nacieron cuatro hermosas bendiciones:
Mueran de ternura:
Después de llorar conmovidos por esta bella historia, hemos sacado dos sabias conclusiones. La primera es: no importa qué tan darks te sientas, siempre podrás encontrar al amor de tu vida y éste puede ser por fuera muy distinto a ti. Y la segunda: las futuras generaciones recordará a estos amorosos periquitos en lugar del perico que tú recordabas en tu infancia:
PRESUMIDAMENTE REAL
AÑORADAMENTE REAL
"¿Todavía no pasa Año Nuevo?", preguntó desorientado un sujeto que creía que estábamos en martes
Un duro golpe a los boomers que van nomás a pasearse
"¿Cómo es posible que la gente esté dispuesta a hacer lo que sea por dinero?",…
Los que lanzaron petardos se quedaron sin regalos... y sin la amistad de los vecinos