Nueva Tenochtitlán.- México demanda un cambio en todos los sentidos: sin tandas vehiculares, de un nuevo Tlatoani que nos haga reír pero quue tampoco nos achicharre en la desgracia, una moneda que no devalúe a la primera ventisca económica, en fin, muchas cosas.
Ante los temblores de la incertidumbre, fueron las manos de Belinda las que han sostenido los cimientos de este gran país. Sus hombros padecen cansancio de tanto sostener la esperanza de 32 estados que conforman nuestro México, pero ella no raja y ahora, envalentonada, nos obsequia lo que viene siendo la canción oficial del cambio.
Con ustedes, el hijo que habría tenido el Himno Nacional Mexicano y el Sapito:
SIN AMOR no hay PATRIA:
¿Qué piensan de esta obra tallada por los propios ángeles? ¿Ya le dieron like?
CIVILIZADAMENTE REAL
VUELA ALTO, HÉROE
IRREFUTABLEMENTE REAL
CREEPY PERO CIERTO
"Yo sabía que su nieto iba a ser grande entre los grandes", comentó Marco Antonio…
CONYUGALMENTE REAL