Meméxico.- Casi todos en este país podemos comprender el amor a la cerveza, ese brebaje venido desde el Olimpo mismo que simplemente queda bien en cualquier lugar: una reunión familiar, una fiesta, para ver un partido o hasta para manejar un Metrobús, clásico.
Esto sucedió anoche en la Linea 4 del Metrobús de la CDMX, donde un usuario captó a uno de los conductores yendo a comprar unas “helodias” para compartirlas y hacer su “luchita” con una policía que lo acompañaba en el recorrido.
Según narra el mismo chismoso (que al parecer nunca ha hecho una tontería por amor), la tragedia llegó cuando el conductor tuvo que confesarle a la poli que no había XX Lager y tuvieron que aguantarse con unas Indio, ni modo.
El aguafiestas lo acusó con los elementos de la estación San Lázaro, que en cumplimiento de su deber, y para nada coludidos con él, lo registraron tan a fondo que lo dejaron ir al no encontrar el cuerpo del delito.
Sin embargo esta mañana la cuenta oficial del Metrobús informó que dicho conductor había sido cesado de sus actividades y la empresa concesionaria multada por los hechos, haciendo aún más triste la historia de este jovial chafirete que tan sólo buscaba una compañera de vida en esta vieja ciudad de hierro de cemento y de gente sin descanso.
Al momento no se sabe nada de la policía pero fuentes brotantes de El Deforma afirman que luego de saber lo ocurrido se fue a echar novio con un conductor del metro, subiendo así un escalón en la escala social y con ello mantiene la esperanza de “mejorar la raza”.
Por su parte el conductor solo, ebrio y devastado ahora busca un trabajo donde le permitan tomar, echar novio, ser irresponsable y manejar, por lo que ya ha sido reclutado por la ruta 67 con derrotero Observatorio-Puente Roto.
DESCARADAMENTE REAL
DESCARADAMENTE REAL
AUTÓMATAMENTE CIERTO
LAVADAMENTE REAL
Son las mismas que durante el año ponían la música a todo volumen
BILINGÜEMENTE REAL