México.- Roberto González, hombre de 30 años, comenzó a desarrollar raíces en ambas piernas luego de esperar seis horas y media a su novia en una tienda de ropa. “Espérame aquí sentado, quiero buscar una blusa color chicle”, dijo la novia y se perdió entre los estantes.
A las primeras horas de espera, Roberto intentó entretenerse viendo los juegos que descargó con su celular. Luego de ganar en todos los juegos, se decidió a leer un libro. Lo terminó y su novia aún no salía de la tienda. Fue cuando comenzó a sentir un extraño hormigueo en ambos pies
y vio que el suelo de la tienda se iba agrietando poco a poco.Minutos más tarde, el joven Roberto empezó a soltar raíces que se internaron en el lujoso suelo de la plaza comercial. Sus tenis terminaron por romperse para darle paso a las raíces que le surgían de los pies.
Inmediatamente, un grupo de biólogos y botánicos dijeron que Roberto comenzó a arborizarse debido al tiempo excesivo de espera, “es probable que, si la novia tarda unas horas más, Roberto termine convirtiéndose en un gran árbol; algo que sería muy pintoresco para una plaza comercial”, expresó un botánico.
Aún no se sabe si la novia ya consiguió encontrar la blusa color chicle, pero, si aún no lo hace, en lugar de novio encontrará un árbol frondoso que algunos expertos le llaman: “el árbol del aburrimiento”.
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