México.- Los permisos que se dan cuando las personas llegan a la tercera edad son magníficos pero también injustos. Quizá el fin de tu vida te hace reflexionar sobre lo poco que te importa el resto de la gente y hasta tu familia, por lo que poco a poco te desvinculas de las normas y comienzas a conducir como un loco, te quedas estorbando con el carrito del súper, y hasta te das permiso de insultar a los niños nada más por diversión.
El caso de estas dulces abuelitas se fue al extremo, justo donde llega el deseo humano más naco que se puede tener: el robo a otro paisano.
Dos dulces abuelitas que abordaron el Metrobús en la estación de Chilpancingo fueron detenidas por agentes de seguridad, debido al reporte de una joven de 23 años que había sido sometida para después despojarla de su celular.
Al parecer, las abuelas del mal, una de 65 y otra de 66 años de edad, utilizaron como principal arma un picahielo
que les fue decomisado después de la detención, además del celular en cuestión. Ambas tuvieron que aplazar su clase de cerámica porque terminaron en el MInisterio Público.
Recomiendan poner villancicos para disimular
Se pasaron de la cena de Navidad a formarse afuera de la tienda La policías…
Parece que hizo pasar consolas de $800 pesos por Play 5
Son los mismos que se la pasaron toda la noche en el celular
Ni el día doble les pagaron
DESPERDICIADAMENTE REAL