Alegaba un lapsus brutus eterno
Consultorio de Remedios Varo.- La Sociedad Mexicana de Psiquiatría retiró la licencia a un afamado psicoanalista y psicoterapeuta por desacato, al no sacar la libretita, no escribir notas, y no decir “ajá”, después de escuchar las afirmaciones de sus pacientes durante las consultas, según dio a conocer el vocero de ese organismo.
“Este psicoterapeuta tuvo varias infracciones previas del Consejo, pues recibimos varios reportes de pacientes indicando que el facultativo no sacaba la libretita, no tomaba notas, ni decía “ajá” asintiendo con la cabeza cada vez que un paciente le hablaba en consulta, le notificamos las advertencias, pero esa conducta volvió a repetirse, por lo que nos vimos obligados a retirarle la licencia para ejercer la profesión”, indicó el presidente de la Sociedad Mexicana de Psiquiatría.
Según indicaron sus colegas, es requisito indispensable en el ejercicio de esta profesión, sacar la libretita, y realizar apuntes, aunque aclararon que por lineamiento nunca se revisa el contenido de esos apuntes, ya que muchas veces contienen notas que no guardan relación con el asunto tratado en la consulta.
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Agregaron también que otro lineamiento indispensable es responder con la interjección “ajá” inmediatamente después de escuchar palabras e incluso cualquier sonido que emita el paciente, no necesariamente con la boca, pues aseguran que dicen ajá cuando el paciente se mueve, tose o estornuda, según sea el caso.
“La falla en cualquiera de estos lineamientos indispensables es causal de inhabilitación y revocación de licencia, además moralmente estamos obligados a hacerlo, pues si mostramos tolerancia, corremos el riesgo de que a los pacientes les agrade más que los terapeutas pronunciemos palabras distintas al “ajá” y nos veamos obligados a dar opiniones o dialogar con ellos, es un riesgo que no podemos correr”, aseguró un colega.
Se estima que con esta sanción ejemplar, sirva como escarmiento para todos aquellos psiquiatras y psicoanalistas que consideren platicar con sus pacientes, pues la única expresión válida por lineamiento es “ajá”, no está permitido el “sí”, puesto que implica aceptación y por ende, responsabilidad, ni el “entiendo”, pues el paciente puede argumentar que tiene comprensión del terapeuta, hecho que también conlleva una responsabilidad y crea un vínculo innecesario del psiquiatra para con el paciente; añadiendo un interés diferente al cobro de la consulta, algo inconveniente para esos profesionistas de la salud.
