14 inesperadas ventajas de tener un novio feo

14 inesperadas ventajas de tener un novio feo

por Lui

3. Su baja autoestima se compensa con su buen humor

 

Coyoacán.- Es claro que este mundo aún tiene esperanza y salvación. No, no todo está perdido. A veces los feos también dejamos de ser vírgenes.  Llega el momento en que una persona por fin se fija en nuestros sentimientos, o por fin sirve de algo ir mucho al gimnasio, o tener algún talento artístico, o tener mucho dinero, o ser superdotado (física o mentalmente).

Cuando los feos por fin tienen novia, aparece una misteriosa rosa blanca, y ellos, como agradecimiento, le prenden una veladora a San Antonio, a la Virgen y al mismísimo Dios, mientras exclaman: “¡gracias, Universo, gracias por darme una novia!”, o también: “¡gracias, Diosito, gracias por hacer que mi novia llegara tarde a la repartición de novios!”

Ustedes, queridos lectores, dirán: ¿pero qué ventaja tendrá andar con un feo? Ay, pues muchas ventajas, uuuh. Pero aquí les diremos catorce ventajas por las que los feos rifamos más que los que tienen la cara bonita. Pásele güerita, pásele güerito, léale sin compromiso:

1. Es menos fácil de que te lo bajen

2. No es infiel porque, aunque quiera, nadie le hace caso

3. Su baja autoestima se compensa con su buen humor

4. De seguro hace magia, o escribe poemas, o sabe papiroflexia, o toca la guitarra, o cuenta chistes

5. Es más inteligente (no le queda de otra)

6. No tendrás celos porque ninguna otra chica se le queda viendo

7. Seguro no tiene ninguna enfermedad o infección sexual, pues era virgen

8. Es un erudito en cómics, videojuegos y películas de súper héroes

9. Quizás es millonario y compensa su fealdad con todo lo que podría comprarte

10. Se deshace en halagos cuando habla de tu belleza

11. Hará tu tarea, con tal de que no lo dejes

12. Sabes que terminará una carrera universitaria e, incluso, podría llegar hasta el Doctorado, pues su fealdad es proporcional a su ñoñez

13. No es mamón (no pueden darse el lujo de ser mamón, pues ya es feo)

14. Le echa muchísimas más ganas a la hora de coshar (pues no sabe cuándo será la última vez que lo haga)

 

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